La VII edición de la Universidad de Verano " Corduba" se ha cerrado con un balance altamente positivo según ha manifestado, esta mañana, su director Miguel Moreno en el transcurso del acto de clausura celebrado en el Aula Magna del Campus de Rabanales que ha presidido el vicerrector de Infraestructuras Antonio Cubero Atienza. Esta balance ha sido también altamente satisfactorio por lo que respecta a los cursos celebrados en el mes de septiembre "lo que nos anima a mantener esta fórmula en sucesivas ediciones", precisó Moreno.

En total se han desarrollado 58 cursos englobados en 5 macroáreas, con un total de 2.387 alumnos, repartidos en las ocho sedes que integran la Universidad de Verano, y 414 ponentes de los cuales el 60 por ciento procedieron de fuera de Córdoba. Otro de los datos destacados es el incremento de los alumnos asistentes a los cursos de la capital con respecto al año pasado y el práctico mantenimiento de la cifra total de matricula pese a la reducción de la oferta global de cursos "lo que apoya el criterio adoptado de reducir el numero de estos pero incrementar la calidad de los programados ", afirmó Moreno.

De las encuestas realizadas se desprende una alta satisfacción por parte de los asistentes que califican con una media de nueve sobre diez la calidad de los cursos recibidos y un 90% de los cuales se muestra dispuesto a repetir la experiencia. Un porcentaje similar declara que las enseñanzas recibidas se adaptaron plenamente a sus expectativas.

Tanto el director de los cursos como el vicerrector de Infraestructuras y los representantes de las entidades patrocinadoras coincidieron en su satisfacción por los resultados y en la necesidad de mantener y perfeccionar esta oferta estival " con calidad e imaginación", apoyando el esfuerzo de la Universidad por llevar su actividad a la provincia y por tratar de configurar todos los años foros de debate atractivos sobre temas de actualidad o sobre materias que respondan a las demandas de formación de los ciudadanos.