Un grupo de alumnos de la Cátedra Intergeneracional de la UCO, junto al profesor José Cosano Moyano, han visitado en viaje de estudios Moscú, San Petersburgo, Tallin y Helsinki. En la capital moscovita llevaron a cabo un recorrido panorámico de la ciudad junto a la tradicional visita a la Plaza Roja, en esta ocasión preparada para la celebración del día San Cirilo y San Metodio, lejos de la imagen en blanco y negro de los desfiles militares ante la nomenklatura de la URSS propios de los años de la guerra fría vividos por los componentes de la expedición. Y siempre con la impresionante vista de las cúpulas doradas de la iglesia de S. Basilio al fondo flanqueda por el Kremlin y los almacenes Gum.
La jornada se completó con un recorrido por la catedral de San Salvador y las visitas al Kremlin y la plaza con las tres catedrales: San Miguel, la Anunciación y la Dormición de la Virgen. Durante los días siguientes el programa incluyó el Parque de la Victoria, el museo de la Segunda Guerra Mundial, la Universidad, la colina de los gorriones y, cómo no, un recorrido en metro y la visita al mausoleo de Lenin antes de salir en tren para San Petersburgo y pasear por la Prospekt Nevsky, una de las más hermosas avenidas del mundo.
En la ciudad de los zares la expedición hizo parada en la iglesia de San Nicolás para seguir a la Fortaleza de San Pedro y San Pablo y, más tarde, a la iglesia de la Resurrección de San Salvador sobre la Sangre Derramada y San Isaac con las gigantescas columnas de su pórtico montadas por el español Agustín de Betancourt. Durante las siguientes jornadas se visitaron el Palacio de Invierno y Ermitage, con un paseo nocturno por los canales para luego tomar el tren rumbo a Tallin.
Con frio y lluvia los alumnos de la Cátedra visitaron la ciudad antigua y la Catedral ortodoxa de Alexander Nevski, el Parlamento de Estonia, su Ayuntamiento, su Farmacia Municipal – la más antigua de Europa- callejeando por el viejo casco. El ferry los llevó luego a Helsinki para dar un paseo en autobús, el puerto, mercado, las grandes avenidas, el Parque Sibelius, la estación de Alvar Aalto, y otros ejemplos de arquitectura finlandesa y, tras una mañana libre, regresar, via aérea, a casa.
