mentos de Bioquímica y Biología Molecular y de Genética de la Facultad de Veterinaria.
La suma de los ganaderos a esta investigación en la que colabora la Consejería de Agricultura y Pesca de la Junta de Andalucía ha quedado fijada esta mañana en un acuerdo suscrito por el vicerrector de Política Científica, Enrique Aguilar Benítez de Lugo, y la presidenta de Aeceriber, Elena Diéguez, y servirá para aportar ejemplares a la fase experimental de la investigación. Concretamente, según ha explicado el profesor Antonio Molina, los científicos de la Universidad de Córdoba emplearán 50 ejemplares de 10 razas y estirpes distintas en una primera fase; 250 ejemplares ibéricos de 20 ganaderías diferentes, en la segunda, y para validar sus resultados, un mínimo de 1.000 muestras de productos derivados del cerdo ibérico.
El objetivo final de la investigación es lograr una herramienta de fácil manejo para detectar el origen racial tanto de los animales como de los productos que se deriven de él. De esta forma, tanto los criadores, como los productores, la industria transformadora e incluso la inspección alimentaria podrán confirmar la pureza de sus productos, detectar fraudes y etiquetar los productos adecuadamente para garantizar la calidad final al consumidor.