"Actualmente, el rango de edad de las paradas cardíacas, que es algo brusco e inesperado, está en el adulto joven, de 25 a 50 años", explicó el diplomado en enfermería Antonio Bracero Jiménez, durante su intervención en los Seminarios Fons Mellaria.
Bracero Jiménez, que es master en Urgencias, Emergencias y Atención a las Catástrofes, destacó "la importancia de que este tipo de cursos llegue al máximo de ciudadanos posibles", añadiendo que "lo ideal que las maniobras de reanimación cardiopulmonar - RCP -, estén universalizadas" y abogando por la existencia de desfibriladores en todos los lugares públicos.
En cuanto a las principales causas de paradas cardiorrespiratorias, el diplomado en enfermería citó el infarto de miocardio y la muerte súbita, "producida por causas inexplicables, patologías que no se detectan en revisiones normales".
Antonio Bracero dijo que "cuando una persona se encuentre mal, lo primero que debe hacer es buscar ayuda de otra cercana, que tenga unos conocimientos básicos en estas situaciones e intentar mantener la tranquilidad".
El ponente de "Primeros auxilios y socorrismo acuático" explicó quien asista a alguien en estas circunstancias, lo primero que debe de comprobar es si la afectada está consciente o no, realizándole estímulos. Si no respira, "comenzar inmediatamente las tareas de RCP, previa llamada al 061 y mantenerlas hasta que llegue el equipo médico especializado".